Estudiantes llevan la Contabilidad de Cooperadoras

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Villa General Belgrano. Córdoba
Estudiantes secundarios llevan la contabilidad a ocho cooperadoras de su pueblo
Son 15 alumnos de un IPEM de Villa General Belgrano, en Córdoba, que aplican los conocimientos aprendidos en el colegio, monitoreando de manera gratuita los movimientos contables de ocho cooperadoras

El proyecto se llama "Cooperativa para Cooperadoras" y lo llevan a cabo los estudiantes del último año del IPEM 168, "Diego de Rojas", de Villa General Belgrano, una de las ciudades turísticas más importantes del valle de Calamuchita, en Córdoba.
Como parte de la materia "Proyecto Integrador", los quince jóvenes ayudan a las comisiones directivas de las cooperadoras de siete escuelas y también del dispensario municipal a poner en orden los números de sus administraciones.
"Esto empezó el año pasado con un proyecto de enseñarle Informática a nuestros padres", cuenta Lucas, quien junto a otros chicos del grupo contó su experiencia en un encuentro organizado por Incide, una ONG cordobesa que promueve proyectos innovadores. "La idea surge a raíz de las carencias que se ven, sobre todo en las cooperadoras escolares de escuelas más marginales, donde los padres que ocupan las comisiones directivas no todos tienen las condiciones para poder administrar fondos, llevar registros y presentar informes", afirma Ricardo Ferreira, el profesor de los chicos y alma mater del proyecto.
La idea entonces fue continuar con la experiencia de Aprendizaje-Servicio a la comunidad plasmada en el proyecto de enseñanza de la Informática; esta vez, uniéndola con la necesidad pública de asesoramiento por parte de las instituciones. Los beneficios, en este caso, resultaron comunes ya que los beneficiarios directos de las cooperadoras son los propios alumnos.
"En el aspecto pedagógico, se trata de aprendizaje y servicio, porque se busca que los chicos tengan un aprendizaje significativo. Es decir, que en la significación del trabajo realizado, se vea el fruto del trabajo, se vea el bien que se está produciendo en la comunidad", indica Ferreira.

Obstáculos y satisfacciones

El proyecto comenzó a planificarse en septiembre de 2001 y fue presentado a la ACEP (Asociación de Cooperadoras de Escuelas Públicas). Antes, se habían hecho las pruebas en la propia cooperadora de la escuela. "Se aprobó el sistema, se cargó el año 2001, se hicieron los balancines y funcionó", recuerda el profesor.
A pesar de esto, algunos integrantes de la ACEP se mostraron reacios a participar. "Nos desconcertó mucho que habiendo una oferta libre, gratuita y de adhesión voluntaria, no hubiera una respuesta totalmente favorable. Pero resolvimos seguir adelante con el Dispensario municipal y el Jardín maternal. A fines de marzo, salen a la luz las dificultades económicas y los problemas en el manejo de los fondos que no involucran a la ACEP en general -aclara Ferreira- sino a algunas cooperadoras que la integraban".
Se hicieron las denuncias; se llevaron a cabo los trámites legales correspondientes y se produjo una renovación de las comisiones directivas cuestionadas.
"La experiencia fue muy buena porque es una manera de que el colegio progrese. La responsabilidad que tenemos en llevar la contabilidad de cooperadoras que nos entregaron todo para hacerlo, nos demuestra que nos tienen confianza. Además, es una forma de evitar fraudes y de hacer las cosas más limpias", asegura Tamara, quien el año próximo comenzará la carrera de Historia en la universidad.
"Es lindo, a pesar de que yo con la contabilidad no me llevo nada bien", dice Lucas. Y aclara que también tuvieron que renegar un poco. "Una vez nos tocó una hoja de carpeta que decía dos artículos y nada más. Y no sabíamos cómo hacer; no tenía ni fecha ni importe. Tuvimos que rebuscárnoslas un poco y llamar al profe...".
A pocos días de terminar la secundaria, ninguno de los chicos piensa en ser contador. Sin embargo, aseguran que la experiencia los ayudará a administrar sus propios recursos en el futuro. "Ellos son los pioneros y han dejado sentadas las bases para continuar", expresa satisfecho Ricardo Ferreira.

Cómo contactarse: IPEM 168, Villa General Belgrano, Córdoba. E-mail: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Fuente: INFORED

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