- Clausuran una empresa que les daba de comer a 6.500 alumnos

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OPERATIVOS DE CONTROL: LA DEFENSORIA DEL PUEBLO PORTEÑA DICE QUE YA HABIA RECIBIDO DENUNCIAS CONTRA ESTA COMPAÑIA EN 2002

Clausuran una empresa que les daba de comer a 6.500 alumnos
Es Siderum S. A., un proveedor de comedores escolares que también abastecía a tres hospitales. En la inspección se encontró mercadería vencida y mal conservada. Y había problemas de limpieza.

Constanza Durán.
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Uno de los concesionarios del servicio de comedores escolares de la Ciudad fue clausurado en un operativo conjunto que realizaron la Dirección de Higiene y Seguridad Alimentaria (DGHYSA), la Unidad Polivalente de Inspecciones (UPI) del Gobierno porteño y la Defensoría del Pueblo. Según consta en los informes que armaron todas las áreas, y a los que Clarín tuvo acceso, la medida se tomó porque el lugar no reunía las condiciones de limpieza adecuadas y el edificio corría riesgo de derrumbe.

Además, en los controles ?que incluyeron a otras dos empresas? los inspectores decomisaron 300 kilos de mercadería vencida o en mal estado de conservación.

Fabiana Fizbin, subsecretaria de Control de la Comuna, dijo que la clausura fue "por motivos edilicios, no por problemas bromatológicos". Sin embargo, en las actas consta que hubo mercadería que fue decomisada en el momento y destruida.

El primer operativo se hizo el 17 de junio. Los inspectores de la DGHYSA, la UPI y la Defensoría llegaron a Palestina 510 (en las actas figura como Rawson, su anterior denominación), en Almagro, donde funciona la empresa Siderum S.A. El local, que ocupa toda la esquina de Palestina y Perón, desde entonces luce una faja de clausura en la entrada. Entre las irregularidades que detallan los inspectores figuran la existencia de matafuegos vencidos, baños sin agua ni saneamiento adecuado, y falta de higie ne en sótanos, entrepisos y la cámara frigorífica donde conservan las verduras.

Por otra parte, según consta en el acta, de los 25 operarios que trabajan en la empresa, diez no tienen libreta sanitaria. Y en el momento de la inspección ?señala el informe?, nueve de los trabajadores estaban escondidos en una terraza del segundo piso, esperando a que los inspectores se retiraran del edificio.

Durante ese operativo decomisaron 273 kilos comida: 110 de pollo, 95 de carne y el resto de pan, avena en paquetes, fideos, polvo para preparar gelatina, harinas, leche en polvo, membrillo, arroz y salsa golf vencida. "La DGHYSA detectó mercadería con rotulación dudosa, sin rotular y expuesta al frío sin protección", dice el informe.

Según confirmaron en el Gobierno porteño, esa empresa les da de comer a pacientes de tres hospitales y a unos 6.500 alumnos. Eso la convierte en el segundo proveedor de la Ciudad de este servicio, después de la Siad ct S.A-Arkino, con 7.359. {mospagebreak}

En la Ciudad de Buenos Aires hay 22 concesionarios que se reparten la atención de 65 mil chicos por día. Y manejan el servicio de las colonias de vacaciones, hospitales y los centros de promoción social. La adjudicación se hace cada dos años por una licitación pública y la actual vence a fin de año.

El monto de la licitación asciende a 60 millones de pesos anuales. En la Dirección de Comedores Escolares explicaron que las firmas son controladas y en caso de denuncias por problemas bromatológicos debe suspendérsele el contrato.

Los otros operativos se desarrollaron el 24 de junio en Potosí 4218, propiedad de la firma Hispan S. A., y en Potosí 4228/30, de Luis y Gómez S. A. En los dos locales, los inspectores incautaron mercadería que las empresas usaban para preparar las viandas.

En la primera incautaron 25 kilos de avena fina y siete de harina por dudar de su rotulado y origen. Allí también decomisaron y destruyeron en un camión compactador mercadería por falta de rótulo y vencida. En esa empresa se labraron actas por falsificación de libretas sanitarias y falta de higiene. Y hasta se llevaron un pack de harina "La trigueña" que, según la DGHYSA, está denunciada por el INAL por contaminación con agroquímicos.

A pesar de estos datos, desde el Gobierno porteño insistieron en que "no existían riesgos para la salud de los chicos", aunque la mercadería que usan estas empresas estaba vencida y no cumple con los requisitos de almacenamiento adecuados que figuran en los pliegos de licitación. "No teníamos ningún tipo de información con respecto a la mercadería, las inspecciones las hace la DGHYSA", dijo Guillermo Moranchel director general de Comedores Escolares.

En el momento del operativo, la firma Luis y Gómez estaba con reformas edilicias. De allí los inspectores se llevaron verduras y carne. El motivo: toda la mercadería estaba en una cámara en refacción en la que trabajaban los obreros, y en contacto permanente con material de albañilería.

En Educación negaron que las empresas tuvieran denuncias anteriores, pero en la Defensoría hay quejas de padres en 2002 contra Siderum y Luis y Gómez por intoxicaciones.

Una madre que pidió reserva de identidad le aseguró a Clarín que en varias oportunidades denunció ante las autoridades escolares el servicio de Siderum. Sus hijos están becados en el comedor escolar.

En las firmas inspeccionadas se labraron infracciones. Y en la Defensoría del Pueblo dispusieron una actuación de oficio que incluye un relevamiento de los comedores para verificar en qué condiciones se encuentran.

Fuente: Clarín en internet

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