Quilmes: Cuestionan los alimentos que ofrecen los kioscos escolares

Algunos de los que no están conformes con la propuesta son los docentes, quienes consideran que es necesario que se preste atención a lo que se ofrece a partir de los comedores escolares.
Sin embargo, una reconocida nutricionista quilmeña terció en el debate y planteó la necesidad de que se avance en todos los frentes en que sea posible. No porque una cosa está mal, hay que dejar de cambiar otras . Además, defendió la necesidad de enseñar a comer y a cocinar sano, desde las escuelas, como ocurre en otros lugares del mundo.

El disparador del debate fue el proyecto de ley presentado en la Legislatura por el diputado socialista Carlos Nivio, quien plantea la necesidad de una regulación de los alimentos y bebidas que se comercializan dentro de los establecimientos educativos, a través de los kioscos y máquinas expendedoras de alimentos. Por medio de la iniciativa legislativa, se prohibiría la venta de gaseosas, golosinas y los denominados snacks , así como todo otro tipo de alimento en cuya composición intervenga una proporción elevada de azúcares, lípidos y/o sodio. El objetivo del proyecto desarrollado por el diputado es actuar contra los elevados índices de sobrepeso y obesidad infanto-juvenil que se registran en la provincia. En ese sentido, el legislador socialista señaló que las estadísticas oficiales indican un elevado crecimiento en la cantidad de chicos con sobrepeso, los que estarían ya superando un 30 por ciento del total, entre los cuales una tercera parte sufriría de obesidad .

EL PROBLEMA SON LOS COMEDORES
El secretario Adjunto del Suteba Quilmes, Adrián Weisberg, señaló en diálogo con PERSPECTIVA SUR, y al ser consultado respecto al proyecto ingresado en la Legislatura, que es algo no demasiado lógico, al menos para la mayor parte de las escuelas públicas .
En el caso de Quilmes, esto puede aplicarse establecimientos públicos únicamente en el centro, y no es seguro tampoco , dijo Weisberg, porque la mayor parte de los chicos que no va a una escuela privada, hoy, está en una situación económica adversa . Pero no sólo esto, sino que una cosa es comprar un alfajor de diez centavos, el que puede hacerlo, y otra es pedirle que un nene se lleve una barrita de cereal que cuesta ocho, nueve o diez veces más .

Y por otra parte, no tiene mucho sentido modificar lo que se ofrece en el kiosco, si al mismo tiempo en el comedor escolar, el menú que propone el Ministerio de Desarrollo Humano bonaerense se basa en una dieta de 1,70 pesos por chico, con altas raciones de polenta y de fideos, y con 80 gramos de pollo el día que está previsto que coman pollo .

Esto equivale , dijo Weisberg, a que 150 pibes coman con cuatro pollos, cuando cualquiera sabe que en una casa de familia un pollo se cocina para cuatro personas . Lo lógico , dijo el Adjunto del gremio docente en Quilmes, sería que los legisladores se ocupen de resolver cuetsiones realmente importantes, como lo que comen los chicos en el comedor, o cuestiones de fondo, para que los chicos puedan volver a comer en sus casas .
Especialmente, cuando en las escuelas públicas, un kiosco muchas veces no es otra cosa que una mesa con cuatro alfajores, que explota la cooperadora, para reunir algunos fondos más.

Fuente: www.perspectivasur.com