Autoridades en Educación buscan sustituir la comida chatarra
- Escrito por Rubén Ostrower
- Publicado en Noticias de Santa Fe
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Representantes de 40 escuelas de Rosario buscan instaurar una alimentación sana en las escuelas eliminando snacks y chocolates e incorporando frutas, sándwiches, lácteos y alfajores de maizena, entre otros.
La jornada de capacitación en cantinas saludables, que es organizado por la secretaría municipal de Salud, intenta instaurar una alimentación sana y combatir la obesidad infantil.
"Proponemos incluir frutas, sándwiches, lácteos y alfajores de maizena a la gran cantidad de snacks y chocolates que son consumidos por los chicos", dijo Beatriz Martinelli, directora general del Programa de la Salud, al exponer ante cantineros, miembros de cooperadoras escolares, maestros, padres y alumnos.
Ante la prensa, Martinelli se mostró "conforme con la respuesta" obtenida en las escuelas y destacó la importancia "de cambiar y diversificar la oferta alimenticia de las cantinas escolares" en la lucha contra la obesidad de los chicos.
En ese sentido, se mencionó un informe oficial realizado por la propia secretaría de Salud, según el cual el 92 por ciento de los chicos en edad escolar consumen los productos de los quioscos que se encuentran dentro de los establecimientos.
Ese estudio se realizó durante el año pasado para conocer los hábitos alimenticios del alumnado dentro de las escuelas.
Se determinó que los chicos consumen sobre todo alimentos ricos en sal, grasas y azúcares, comidas que a futuro generan graves enfermedades como la obesidad y el colesterol.
Según el estudio, el 33 por ciento de los chicos consume golosinas, el 30 por ciento chocolates, el 20 por ciento productos snacks, el 11 por ciento harinas y el restante 6 por ciento sándwiches.
El proyecto "cantinas saludables" tiene por objeto capacitar a cantineros, maestros y alumnos sobre la importancia de una alimentación que no dañe la salud, y responde al iniciado a fines de 2004, luego de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declarara a la obesidad como un "problema de salud pública mundial" y alentara a que se trabaje el tema de la alimentación y la actividad física desde la escuela.
"Queremos que los adultos reflexionen sobre lo que consumen los niños, especialmente en la escuela", explicó Martinelli, agregando que "nuestro objetivo es que en las cantinas haya otras ofertas como yogures, leches, flanes, frutas de estación, alfajores de maicena, galletitas de agua y sándwiches de jamón y queso, para que los chicos puedan elegir", sintetizó la funcionaria.
La jornada de capacitación en cantinas saludables, que es organizado por la secretaría municipal de Salud, intenta instaurar una alimentación sana y combatir la obesidad infantil.
"Proponemos incluir frutas, sándwiches, lácteos y alfajores de maizena a la gran cantidad de snacks y chocolates que son consumidos por los chicos", dijo Beatriz Martinelli, directora general del Programa de la Salud, al exponer ante cantineros, miembros de cooperadoras escolares, maestros, padres y alumnos.
Ante la prensa, Martinelli se mostró "conforme con la respuesta" obtenida en las escuelas y destacó la importancia "de cambiar y diversificar la oferta alimenticia de las cantinas escolares" en la lucha contra la obesidad de los chicos.
En ese sentido, se mencionó un informe oficial realizado por la propia secretaría de Salud, según el cual el 92 por ciento de los chicos en edad escolar consumen los productos de los quioscos que se encuentran dentro de los establecimientos.
Ese estudio se realizó durante el año pasado para conocer los hábitos alimenticios del alumnado dentro de las escuelas.
Se determinó que los chicos consumen sobre todo alimentos ricos en sal, grasas y azúcares, comidas que a futuro generan graves enfermedades como la obesidad y el colesterol.
Según el estudio, el 33 por ciento de los chicos consume golosinas, el 30 por ciento chocolates, el 20 por ciento productos snacks, el 11 por ciento harinas y el restante 6 por ciento sándwiches.
El proyecto "cantinas saludables" tiene por objeto capacitar a cantineros, maestros y alumnos sobre la importancia de una alimentación que no dañe la salud, y responde al iniciado a fines de 2004, luego de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declarara a la obesidad como un "problema de salud pública mundial" y alentara a que se trabaje el tema de la alimentación y la actividad física desde la escuela.
"Queremos que los adultos reflexionen sobre lo que consumen los niños, especialmente en la escuela", explicó Martinelli, agregando que "nuestro objetivo es que en las cantinas haya otras ofertas como yogures, leches, flanes, frutas de estación, alfajores de maicena, galletitas de agua y sándwiches de jamón y queso, para que los chicos puedan elegir", sintetizó la funcionaria.
Fuente: INFOBAE
